La trama nos sitúa en un mundo fantástico en el que existen bestias maléficas, tesoros ocultos... y hunters o "cazadores", personas que viven increíbles peripecias para desentrañar los misterios del planeta. Gon Freecss es un muchacho que se presenta a los exámenes de hunter con el fin de obtener la tarjeta de licencia. Para superarlos, debe demostrar que posee las habilidades que requiere un trabajo tan complicado y peligroso como ese. En las pruebas traba amistad con otros tres aspirantes: el alegre Leorio, siempre vestido con traje y gafas de sol; Kurapika, un chico rubio bastante serio y con una extraña mirada; y Killua, todo un pasota. Desde ese momento se hacen inseparables y empiezan a vérselas tanto con bestias maléficas como con humanos malvados.

La trama nos sitúa en un mundo fantástico en el que existen bestias maléficas, tesoros ocultos... y hunters o "cazadores", personas que viven increíbles peripecias para desentrañar los misterios del planeta. Gon Freecss es un muchacho que se presenta a los exámenes de hunter con el fin de obtener la tarjeta de licencia. Para superarlos, debe demostrar que posee las habilidades que requiere un trabajo tan complicado y peligroso como ese. En las pruebas traba amistad con otros tres aspirantes: el alegre Leorio, siempre vestido con traje y gafas de sol; Kurapika, un chico rubio bastante serio y con una extraña mirada; y Killua, todo un pasota. Desde ese momento se hacen inseparables y empiezan a vérselas tanto con bestias maléficas como con humanos malvados.

La trama nos sitúa en un mundo fantástico en el que existen bestias maléficas, tesoros ocultos... y hunters o "cazadores", personas que viven increíbles peripecias para desentrañar los misterios del planeta. Gon Freecss es un muchacho que se presenta a los exámenes de hunter con el fin de obtener la tarjeta de licencia. Para superarlos, debe demostrar que posee las habilidades que requiere un trabajo tan complicado y peligroso como ese. En las pruebas traba amistad con otros tres aspirantes: el alegre Leorio, siempre vestido con traje y gafas de sol; Kurapika, un chico rubio bastante serio y con una extraña mirada; y Killua, todo un pasota. Desde ese momento se hacen inseparables y empiezan a vérselas tanto con bestias maléficas como con humanos malvados.