Negi es un niño de diez años, lindo, inteligente y con talento; tanto, que es enviado desde Inglaterra a dar clases a la Academia Mahora en el nivel de secundaria, una academia solo para chicas. Rodeado de mujeres más grandes que él y sin haber viajado nunca a Japón, Negi tendrá que adaptarse a una nueva vida como maestro, en otro país y con un objetivo secreto: nadie puede enterarse de lo que realmente es Negi Springfield ni de lo que debe hacer para lograr su objetivo. Asuna es su primer problema, pero vendrán muchos más en poco tiempo.

Un hombre completamente vestido de negro que se hace llamar Guts, que tiene una mano artificial de hierro duro y que carga una espada gigantesca que supera su estatura. En el lugar al cual se dirige llueve sangre y hay montañas de cadáveres apilados. Puck, un elfo que se mantiene a su lado desde que Guts le salvó la vida, quedó impresionado por su increíble fuerza, aunque a la vez le causa temor lo violento que es el mundo en el que él vive. Una horda de espíritus malignos que obstaculizan su camino. ¿acaso la marca que tiene en el cuello lo incita a buscar la venganza...?

Negi es un niño de diez años, lindo, inteligente y con talento; tanto, que es enviado desde Inglaterra a dar clases a la Academia Mahora en el nivel de secundaria, una academia solo para chicas. Rodeado de mujeres más grandes que él y sin haber viajado nunca a Japón, Negi tendrá que adaptarse a una nueva vida como maestro, en otro país y con un objetivo secreto: nadie puede enterarse de lo que realmente es Negi Springfield ni de lo que debe hacer para lograr su objetivo. Asuna es su primer problema, pero vendrán muchos más en poco tiempo.

Un manga atípico y apasionante donde una trama completamente realista es presentada con ciertos detalles surrealistas. Básicamente narra la vida de Punpun desde primaria hasta la universidad, creciendo con una familia disfuncional y varios traumas. El ambiente es medio deprimente y oscuro a veces. Se muestra como Punpun lidia con la soledad, la dificultad para hacer amigos, el divorcio de sus padres, la primera experiencia sexual con una persona de su entorno que dista de ser lo ideal... y un amor platónico recurrente al que se aferra pese a que otras mujeres se interesan por él. Al final el mensaje es: “la vida es dura y no tiene solución, hay que bancársela y seguir”.

Seguimos ampliando el catálogo del maestro Toriyama con la historia de Nekomajin, un gato-genio dispuesto a proteger a sus vecinos del mal siempre y cuando le paguen lo que corresponde. Este gato luchador nació en 1999, tiempo después de que Toriyama terminara Dragon Ball y retoma las historias más humorísticas y desopilantes que caracterizaban al maestro antes de su obra cumbre, peeeeero eso no le impidió autoparodiarse de lo lindo con Nekomajin Z, últimos capítulos contenidos en este unitario donde el susodicho gato se enfrenta a algunos de los rivales más emblemáticos de Goku.

Un manga atípico y apasionante donde una trama completamente realista es presentada con ciertos detalles surrealistas. Básicamente narra la vida de Punpun desde primaria hasta la universidad, creciendo con una familia disfuncional y varios traumas. El ambiente es medio deprimente y oscuro a veces. Se muestra como Punpun lidia con la soledad, la dificultad para hacer amigos, el divorcio de sus padres, la primera experiencia sexual con una persona de su entorno que dista de ser lo ideal... y un amor platónico recurrente al que se aferra pese a que otras mujeres se interesan por él. Al final el mensaje es: “la vida es dura y no tiene solución, hay que bancársela y seguir”.

Enmarcada en un futuro post apocalíptico en que la Tierra ha sufrido una catástrofe conocida como el Segundo Impacto, cuenta la historia de un chico bastante depresivo y apático llamado Shinji Ikari. Este personaje se verá súbitamente envuelto en la guerra más importante que la humanidad alguna vez tuvo que enfrentar: la llegada de los Ángeles. Para enfrentarlos, la ONU crea NERV que será la encargada de mantener y manejar a los Evangelion, humanoides gigantes cubiertos de armaduras mecánicas, que constituyen la única línea de defensa posible contra este enemigo; los cuales solo pueden ser manejados por chicos que hayan nacido en la fecha de la catástrofe planetaria.

En la frontera entre el mundo humano y el divino, viven alrededor de ocho millones de seres. Yato es un dios menor de la calamidad que sueña con tener una gran cantidad de seguidores que lo adoren y le recen plegarias. Desafortunadamente, su sueño está lejos de hacerse realidad, pues no tiene siquiera un santuario dedicado a su persona. Para empeorar las cosas, la única socia que tenía para ayudar a resolver los problemas de la gente acaba de renunciar. Su divina suerte sólo podría cambiar cuando conoció a Hiyori Iki, una estudiante de secundaria.

En la frontera entre el mundo humano y el divino, viven alrededor de ocho millones de seres. Yato es un dios menor de la calamidad que sueña con tener una gran cantidad de seguidores que lo adoren y le recen plegarias. Desafortunadamente, su sueño está lejos de hacerse realidad, pues no tiene siquiera un santuario dedicado a su persona. Para empeorar las cosas, la única socia que tenía para ayudar a resolver los problemas de la gente acaba de renunciar. Su divina suerte sólo podría cambiar cuando conoció a Hiyori Iki, una estudiante de secundaria.

En la frontera entre el mundo humano y el divino, viven alrededor de ocho millones de seres. Yato es un dios menor de la calamidad que sueña con tener una gran cantidad de seguidores que lo adoren y le recen plegarias. Desafortunadamente, su sueño está lejos de hacerse realidad, pues no tiene siquiera un santuario dedicado a su persona. Para empeorar las cosas, la única socia que tenía para ayudar a resolver los problemas de la gente acaba de renunciar. Su divina suerte sólo podría cambiar cuando conoció a Hiyori Iki, una estudiante de secundaria.

En la frontera entre el mundo humano y el divino, viven alrededor de ocho millones de seres. Yato es un dios menor de la calamidad que sueña con tener una gran cantidad de seguidores que lo adoren y le recen plegarias. Desafortunadamente, su sueño está lejos de hacerse realidad, pues no tiene siquiera un santuario dedicado a su persona. Para empeorar las cosas, la única socia que tenía para ayudar a resolver los problemas de la gente acaba de renunciar. Su divina suerte sólo podría cambiar cuando conoció a Hiyori Iki, una estudiante de secundaria.

En la frontera entre el mundo humano y el divino, viven alrededor de ocho millones de seres. Yato es un dios menor de la calamidad que sueña con tener una gran cantidad de seguidores que lo adoren y le recen plegarias. Desafortunadamente, su sueño está lejos de hacerse realidad, pues no tiene siquiera un santuario dedicado a su persona. Para empeorar las cosas, la única socia que tenía para ayudar a resolver los problemas de la gente acaba de renunciar. Su divina suerte sólo podría cambiar cuando conoció a Hiyori Iki, una estudiante de secundaria.